Para disfrutar plenamente de una cafetera francesa sólo necesitas 3 elementos (agua, café molido y la misma cafetera). Además sólo debes seguir estos simples pasos:
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Calentar agua: Hierve agua fresca en una tetera o en una cacerola..
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Preparar la cafetera: Retira la tapa y el émbolo de la cafetera francesa. Coloca café molido en el fondo del recipiente de vidrio.
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Verter el agua: Vierte el agua caliente sobre el café molido en la cafetera francesa. Llena la cafetera, dejando aproximadamente una pulgada de espacio desde la parte superior.
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Remover: Usa una cuchara para remover suavemente la mezcla de agua y café. Esto asegura que el café molido se mezcle bien con el agua.
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Colocar el émbolo: Coloca el émbolo en la parte superior de la cafetera, pero no lo presiones todavía. Deja reposar la mezcla durante aproximadamente 4 minutos. Este tiempo puede variar dependiendo de tus preferencias de fuerza de café.
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Presionar el émbolo: Después de que el café haya reposado, presiona lentamente el émbolo hacia abajo. Esto separará el café molido del líquido y evitará que el café se siga extrayendo.
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Servir: Con el émbolo completamente presionado hacia abajo, sirve el café vertiéndolo en tazas. Asegúrate de hacerlo con un vertido lento y constante para evitar derrames.
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Disfrutar: ¡Ahora puedes disfrutar de tu café recién preparado! Ajusta el sabor agregando azúcar, crema o leche según tus preferencias personales.
Recuerda que estos son los pasos básicos, pero siempre puedes ajustar el proceso según tu gusto personal y la calidad del café que estés utilizando.